En los negocios, ¿todo vale?

ANDERSONGuillem Masdeu (2)Anderson Requiao
Legal& Compliance Associate y Data Privacy Officer y
Guillem Masdeu
Director Jurídico & Compliance Officer
NOVARTIS CONSUMER HEALTH comentan que en nuestra sociedad globalizada, donde las empresas compiten en mercados muy regulados y con complejas y sofisticadas normativas legales, las organizaciones tienen cada vez más necesidad de mantener bajo control el riesgo de incumplir la normativa. Dicho incumplimiento puede exponerles a sanciones administrativas y legales, pérdidas financieras y/o daños a la imagen e incluso poner en peligro la propia continuidad de la organización.

En dicho contexto, ciertas funciones y posiciones se han convertido en estratégicas para las compañías. Este es el caso del Compliance Officer, una figura impulsada inicialmente por el creciente escrutinio de los reguladores de Estados Unidos y Europa y que poco a poco se va extendiendo al resto del mundo con la ayuda y el impulso del alcance extraterritorial de algunas leyes anticorrupción como la FCPA de Estados Unidos y la UK Anti-Bribery Act del Reino Unido.

Las responsabilidades de un Compliance Officer dependen de la posición que ocupa dentro de su organización. En muchas compañías multinacionales es común encontrar Compliance Officer a nivel global, regional y local, con distintas responsabilidades dependiendo del nivel.

Un buen Compliance Officer para cumplir con sus funciones debe tener un excelente conocimiento del negocio, ser abierto y curioso y estar capacitado para actuar en un entorno regulatorio siempre cambiante. En general, el Compliance Officer debe tener la capacidad de liderar y desarrollar personas, de gestionar proyectos complejos y solucionar problemas, de comunicar y transmitir conocimientos y de gestionar situaciones de crisis. Igualmente, el Compliance Officer debe saber trabajar con personas de culturas diferentes a la suya y con representantes de cualquier departamento o nivel de la organización. En todo caso es esencial que el Compliance Officer tenga la habilidad de interactuar con la dirección de la organización.

También es esencial que el Compliance Officer encarne los valores de su organización y respete y haga respetar dichos valores, actuando siempre éticamente.

El Compliance Officer debe saber compatibilizar distintos intereses corporativos que a primera vista podrían parecer antagónicos o contrapuestos. Es parte de su papel hacer ver que un crecimiento sostenible es más importante para la organización que tener ciertos repuntes de crecimiento que puedan atribuirse a prácticas éticamente dudosas y que no sean sostenibles en el tiempo. Es obligación del Compliance Officer conseguir que la organización lleve a cabo sus actividades de forma responsable y ética.

Al fin y al cabo, en los negocios no todo vale. Es tan importante lo que hace una organización como cómo lo hace.

 

Instructores de Corporate Compliance Officer. Barcelona 7 y 8 de Octubre de 2014